Es normal defecar entre tres veces al día y tres veces a la semana, siempre que las heces (materia fecal) sean blandas y cómodas de expulsar. Una persona que sufre estreñimiento tiene heces duras o grumosas, que son difíciles de expulsar. El estreñimiento crónico afecta al 15-30% de las personas, y suele darse en niños pequeños y ancianos, siendo más frecuente en las mujeres que en los hombres.
El tiempo de tránsito es la duración entre el momento en que los alimentos entran en la boca y el momento en que los residuos sobrantes salen finalmente en forma de heces. Una comida puede tardar entre 12 y 72 horas en recorrer el tubo digestivo. Cada persona es única; el patrón normal de defecación de una persona puede ser muy diferente del de sus familiares o amigos. Algunos individuos tienen un patrón irregular, sin saber qué esperar. Normalmente, antes de que los alimentos entren en el colon, la mayor parte de los nutrientes han sido absorbidos por el cuerpo y la función del colon es eliminar el agua. Si alguien tiene un tiempo de tránsito largo, es decir, los alimentos pasan lentamente por el colon, entonces se absorbe demasiada agua, endureciendo las heces.
Causas de las heces duras
Para entender las causas de las heces duras, primero debes conocer cómo funciona tu sistema digestivo. Una vez que la mayoría de los nutrientes de los alimentos que ingerimos son absorbidos por el intestino delgado, éste libera el líquido y la fibra restantes hacia el intestino grueso, donde estas sustancias sufren el proceso de formación de las heces.
A medida que la materia fecal se abre camino a través del intestino grueso, gran parte del líquido se extrae, formando unas heces que están listas para ser evacuadas durante la defecación. Cuando la materia fecal tarda demasiado en pasar por la parte inferior del intestino grueso, se puede extraer aún más líquido, lo que da lugar a la formación de heces duras y secas.
Causas relacionadas con la medicación
A veces las heces duras se deben a algo que ha comido (o no ha comido), así como a los medicamentos que toma. Los ejemplos incluyen:
- antiácidos que contienen aluminio y calcio
- anticolinérgicos
- anticonvulsivos para prevenir las convulsiones
- antiespasmódicos
- Bloqueantes de los canales de calcio
- diuréticos
- suplementos de hierro
- Medicamentos utilizados para tratar la depresión
- Medicamentos utilizados para tratar la enfermedad de Parkinson
- Medicamentos narcóticos para el dolor
Causas relacionadas con la dieta y el estilo de vida
Las causas de las heces duras relacionadas con la dieta incluyen la deshidratación (no beber suficiente agua) y una dieta baja en fibra. Algunas posibles causas de las heces duras relacionadas con el estilo de vida son:
- cambios en la dieta
- cambio de medicamentos
- No realizar una actividad física regular
- viajar
Si una persona ignora con frecuencia las ganas de defecar, esto puede provocar que las heces sean más difíciles de expulsar. Esto se debe a que retener las deposiciones puede provocar cambios en el cerebro que afectan a las futuras ganas de defecar.
Las heces pueden acumularse dentro del tracto digestivo y hacerse más difíciles de evacuar.
Causas médicas
A veces, una condición médica subyacente puede causar heces duras. Ejemplos de estas condiciones incluyen:
- envejecimiento
- problemas anatómicos del tracto digestivo
- Las lesiones cerebrales
- enfermedad celíaca
- diverticulitis
- Condiciones relacionadas con las hormonas, como el hipotiroidismo
- Obstrucciones intestinales
- tumores intestinales
- Enfermedad de Parkinson
- embarazo
- proctitis, una inflamación de la glándula prostática
- Las lesiones de la médula espinal
Algunas de estas afecciones, como la obstrucción intestinal, pueden ser una emergencia médica. Debido a que las heces no pueden salir, una persona puede experimentar complicaciones potencialmente mortales si el intestino se filtra en el revestimiento intestinal.
Tratamiento de las heces duras
Terapia con medicamentos
Si el estreñimiento no mejora con la dieta y los cambios en el estilo de vida, entonces hay suplementos y medicamentos disponibles.
Agentes formadores de masa: Están hechos de fibra no digerible, que absorbe y retiene el líquido y ayuda a formar unas heces blandas y voluminosas (por ejemplo, Metamucil®, Prodiem®). Aunque no son de acción rápida, son seguros para su uso a largo plazo. Añada estos productos a su dieta gradualmente y aumente la ingesta de líquidos al mismo tiempo.
Enemas: Un enema implica la inserción de un líquido, normalmente agua, en el recto a través del ano. Normalmente, después de mantener el líquido en su lugar durante unos minutos, hay una intensa urgencia de mover los intestinos.
Ablandadores de heces: Estos productos actúan reteniendo el agua en las heces (por ejemplo, Colace®). Son seguros para su uso a largo plazo y para las mujeres embarazadas y los ancianos.
Lubricantes: Los laxantes lubricantes recubren el colon y las heces con una película impermeable, lo que permite que permanezcan blandas y se deslicen fácilmente por el intestino, normalmente en un plazo de 6 a 8 horas. No utilice estos productos durante más de una semana, ya que se ha demostrado que algunos provocan deficiencias vitamínicas e interacciones con los medicamentos. Un ejemplo de laxante lubricante es el aceite mineral. No se recomienda a las mujeres embarazadas ni a las personas que tienen dificultades para tragar.
Estimulantes: Estos laxantes aumentan las contracciones musculares para mover los alimentos a lo largo del tracto digestivo más rápidamente (por ejemplo, Ex-lax®, Dulcolax®, aceite de ricino, té de sen y Senokot®). Los estimulantes suelen recomendarse para un uso a corto plazo. Sin embargo, en algunos individuos, el estreñimiento no se resuelve con los ajustes dietéticos, el ejercicio o el uso de laxantes a corto plazo. En el caso de personas con estreñimiento persistente o difícil, los médicos pueden sugerir el uso de laxantes a largo plazo. No se recomiendan para las mujeres embarazadas.
Hiperosmóticos: Los laxantes osmóticos favorecen los movimientos intestinales al atraer agua hacia el intestino desde el tejido cercano (lumen intestinal), ablandando así las heces. Algunos de estos laxantes pueden provocar desequilibrios electrolíticos si extraen demasiados nutrientes y otras sustancias con el agua. Pueden aumentar la sed y la deshidratación. Hay cuatro tipos principales de hiperosmóticos:
Los laxantes salinos son sales disueltas en líquido; vacían rápidamente todo el contenido del intestino, y suelen actuar entre 30 minutos y 3 horas. Ejemplos de laxantes salinos son las sales de citrato (por ejemplo, Royvac®), los preparados de magnesio (por ejemplo, Phillips’® Milk of Magnesia), las sales de sulfato y el fosfato de sodio. No están destinados a un uso prolongado ni a mujeres embarazadas.
Los laxantes de lactulosa son agentes similares al azúcar que actúan de forma parecida a los laxantes salinos, pero a un ritmo mucho más lento, y a veces se utilizan para tratar el estreñimiento crónico. Tardan entre 6 horas y 2 días en producir resultados.
Los laxantes poliméricos están formados por grandes moléculas que hacen que las heces retengan agua. Suelen ser no granulados, insípidos y son bien tolerados para el estreñimiento ocasional. Los resultados pueden esperarse en un plazo de 6 horas, pero pueden tardar más en función de la dosis. Un ejemplo de laxante polimérico es el polietilenglicol (por ejemplo, PegaLAX®).
La glicerina está disponible en forma de supositorio y tiene principalmente un efecto hiperosmótico, pero también puede tener un efecto estimulante por el estearato de sodio utilizado en el preparado. La glicerina está disponible a través de varios fabricantes.
Enterocinética: El succinato de prucaloprida (Resotran®) actúa dirigiéndose a los receptores de serotonina (5-HT4) del tubo digestivo para estimular la motilidad (movimiento muscular) y cuenta con la aprobación del Ministerio de Sanidad de Canadá para el tratamiento del estreñimiento crónico idiopático en mujeres en las que el tratamiento con laxantes no ha proporcionado alivio. Resotran® suele producir una evacuación intestinal en 2 ó 3 horas y, a continuación, suelen empezar a producirse evacuaciones completas espontáneas a los 4 ó 5 días de iniciar el tratamiento. Los efectos secundarios pueden incluir náuseas, diarrea, dolor abdominal y cefalea, sobre todo después de la dosis inicial y luego disminuyen con el tratamiento continuo.
Agonista de la guanilato ciclasa C: La linaclotida (Constella®) actúa aumentando la secreción de líquido intestinal, lo que ayuda a facilitar el paso de las heces por el tubo digestivo, aliviando los síntomas asociados, y cuenta con la aprobación de Health Canada para el tratamiento del estreñimiento crónico idiopático en hombres y mujeres. En los ensayos clínicos, Constella® mostró una mejora estadísticamente significativa en comparación con el placebo en cuanto a las deposiciones completas espontáneas. Los resultados se produjeron en la primera semana, a menudo en el primer día, de la administración de la dosis y se mantuvieron durante las 12 semanas de tratamiento. La diarrea es el efecto secundario más frecuente.
Tratamiento médico de la caca dura
Algunos ejemplos de medicamentos que un médico puede recetar o recomendar son:
Agentes formadores de volumen. Algunos ejemplos son Citrucel o FiberCon. Estos medicamentos ayudan a añadir volumen a las heces, facilitando su evacuación.
Agentes osmóticos. Por ejemplo, MiraLAX. Estos medicamentos atraen agua a las heces, facilitando su evacuación.
Ablandadores de heces, como el docusato sódico (Colace). Esto ayuda a ablandar las heces duras para que no sean tan difíciles de expulsar.
Lo ideal es que estos métodos sean una solución a corto plazo. Si las heces duras provocan problemas médicos importantes, como una obstrucción intestinal o un prolapso rectal, es posible que haya que operar. Esto suele ser un último intento de corregir un problema subyacente.
Prevenir o aliviar las heces duras
Puede utilizar estos consejos para ayudar a aliviar las ocurrencias ocasionales de heces duras. Si sus problemas son continuos, debe consultar a su médico. Estos consejos cubrirán las heces duras tanto con como sin estreñimiento.
Trate su estreñimiento: Los movimientos intestinales infrecuentes son a menudo un factor importante en la experiencia de las heces duras. Si experimenta estreñimiento de forma regular, es esencial que acuda a su médico para saber exactamente qué puede estar causando el problema. Un diagnóstico preciso es esencial para desarrollar una estrategia de tratamiento. Si se confirma que el estreñimiento es el problema, aprenda los cuidados personales para el estreñimiento y cómo se trata el estreñimiento crónico.
Añada fibra a su dieta: Aunque la investigación sobre la fibra dietética y las heces duras no es concluyente, hay algunos indicios de que aumentar la fibra soluble puede ser útil. La fibra soluble se disuelve en agua, por lo que ablanda las heces. La fibra soluble se encuentra en muchas frutas, verduras, legumbres y cereales. La linaza, las semillas de chía y el psilio también son excelentes fuentes de fibra soluble. Aprenda reglas sencillas para añadir fibra a su dieta, los mejores alimentos para comer cuando está estreñido y los alimentos que debe evitar cuando está estreñido.
Beba más agua: Si no se hidrata completamente, su cuerpo obtendrá el agua que necesita extrayendo más líquido de sus heces. Esto puede ser una de las principales causas de las heces duras. Una de las cosas más fáciles que puede hacer para mantener sus heces blandas es beber cantidades adecuadas de agua durante todo el día.
En su esfuerzo por conseguir unas heces más blandas, puede que también tenga que hacer un cambio en lo que está bebiendo. El alcohol y la cafeína son deshidratantes, por lo que puede que tenga que reducir su consumo de café, cócteles y refrescos. Si elige una bebida deshidratante, asegúrese de compensarla con un buen vaso de agua. Vea más sobre cuándo necesita beber más agua.
Preste atención a los impulsos de ir al baño: Muchas personas tienen la tendencia a tratar de posponer las deposiciones, prefiriendo esperar hasta que estén en la comodidad de su casa, o hasta que haya un momento más conveniente.
Lo que hay que tener en cuenta:
Las heces duras son una señal de que las heces están pasando demasiado tiempo en el colon.
Es esencial que te pongas en sintonía con las necesidades de tu cuerpo y te dirijas al baño cuando tu cuerpo te indique que está preparado para una evacuación. También pueden ser útiles las estrategias de reeducación intestinal.
Cuando sea necesario, utilice un ablandador de heces: Los ablandadores de heces son productos de venta libre que sirven para ablandar las heces y ayudar a iniciar la evacuación. Reducen la cantidad de líquido que absorben los intestinos, dejando más agua en las heces. Provocan la defecación en un plazo de 12 a 72 horas.
El principal ingrediente activo de los productos ablandadores de heces de venta libre es el docusato, y las marcas más comunes son Colace, Correctol, Diocto, Doxinate, Ex-Lax Stool Softener, Fleet Sof-Lax, Modane Soft, Phillips’ Stool Softener y Surfak. Los ablandadores de heces se diferencian de los supositorios, que son una forma de laxante estimulante. Los ablandadores de heces se consideran generalmente una alternativa más segura, pero sólo para su uso a corto plazo. Consulte siempre a un médico antes de tomar cualquier producto de venta libre.
Pruebe el masaje, la biorretroalimentación y las terapias alternativas: El automasaje abdominal se ha estudiado como tratamiento del estreñimiento. Puede estimular los músculos implicados en la producción de los movimientos intestinales y reducir el estrés. También se ha estudiado la biorretroalimentación para ayudar a las personas con estreñimiento. El uso de probióticos puede ayudar. Las terapias alternativas que no tienen efectos probados incluyen la acupuntura y la acupresión. Los expertos médicos advierten del uso de productos naturales comercializados como laxantes, ya que no se puede asegurar la dosis y la pureza, y puede haber interacciones con otros medicamentos que se estén tomando.
Acuda a su médico para recibir tratamiento: Es bueno trabajar con su médico cuando sus síntomas persisten, y también puede estar más seguro de que éstos no interferirán con cualquier otro medicamento que esté tomando. Su médico puede recomendarle ablandadores de heces y varios tipos de laxantes, tanto de venta libre como con receta. Hay otros medicamentos que el médico puede recetar, como Amitiza (lubiprostona) y Linzess (linaclotida), que llevan agua al intestino.
Leave a Comment